¿Por qué sentimos calor de repente? Te despiertas empapada en sudor. El corazón se acelera. Sientes que el calor sube desde el pecho hasta el rostro. No es fiebre ni ansiedad. Es un sofoco, también conocido como bochorno.
Este síntoma afecta a más del 80% de las mujeres durante la menopausia, según datos de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia. A menudo se presenta años antes, en la etapa conocida como perimenopausia.
El sofoco no es solo una molestia pasajera. Puede interferir con el sueño, el trabajo, las relaciones y la calidad de vida. Por eso, entender su origen y cómo mitigarlo de forma natural es clave para el bienestar de la mujer.
¿Cómo se siente un sofoco de menopausia?
Los sofocos se sienten como una oleada de calor que aparece de repente, a menudo acompañada de sudoración excesiva, enrojecimiento del rostro, palpitaciones y, en ocasiones, sensación de mareo o ansiedad. Duran entre 1 y 5 minutos, aunque en algunos casos se alargan más.
Pueden suceder varias veces al día y, en especial, durante la noche. Cuando ocurren al dormir, se conocen como sofocos nocturnos, e interrumpen gravemente el descanso.
Cada mujer lo vive de forma distinta, pero en general, el bochorno es una sensación que genera incomodidad, vergüenza o irritabilidad.
¿Qué causa los bochornos?
Los bochornos están relacionados con la disminución de estrógenos. Esta bajada hormonal altera el sistema que regula la temperatura corporal. El cerebro interpreta que hay sobrecalentamiento, aunque no sea así, y provoca una respuesta: sudoración, vasodilatación, palpitaciones.
Factores como el estrés, el alcohol, el café, las comidas picantes y el tabaco pueden intensificar estos episodios. También hay un componente genético y, según algunos estudios, un vínculo con la microbiota intestinal.
¿Cómo saber si son los calores de la menopausia?
Una señal clara es la frecuencia y el contexto en que aparecen. Si eres una mujer entre los 40 y los 55 años, y experimentas episodios súbitos de calor, sobre todo por la noche o en momentos de tensión, es probable que sean bochornos asociados a la perimenopausia o menopausia. Cuando existe dificultad para dormir, existen complementos como DONNAplus Menocífuga Noche que pueden ayudarnos a conciliar el sueño, gracias a sus ingredientes como el extracto de la raíz de Cimicífuga, la combinación de vitamina D3 y K2, el ácido fólico y la melatonina.

Otras pistas incluyen cambios menstruales, irritabilidad, insomnio, sequedad vaginal o fatiga persistente. Ante la duda, un análisis hormonal (FSH, estradiol) puede confirmar si estás en transición menopáusica.
¿Cómo quitar el bochorno de la menopausia? Consejos eficaces para aliviar este síntoma
Por un lado tenemos la terapia hormonal sustitutiva (THS), pero no todas las mujeres pueden o desean utilizarla. Por eso, existen enfoques naturales eficaces que pueden ayudar a aliviar estos síntomas. La Agencia Europea del Medicamento (EMA) reconoce el uso tradicional de plantas como la Cimicífuga Racemosa, por sus efectos moduladores hormonales y su buena tolerancia.
Un estudio reciente publicado en Climacteric concluye que los extractos estandarizados de estas plantas pueden reducir la frecuencia e intensidad de los bochornos hasta en un 50%, sin efectos adversos graves. Complementos como DONNAplus Menocífuga Vital son ideales para el día a día, ya que contiene extracto de Cimicífuga, Damiana Liboost® y vitaminas B6, B9, B12 y D3, así como extracto de naranja amarga que favorece el mantenimiento normal del peso.
Para momentos en los que los síntomas alcanzan una mayor intensidad, DONNAplus Menocífuga Forte aporta una dosis reforzada de principios activos y antioxidantes naturales, como la Cimicífuga que ayuda las mujeres a sobrellevar los signos reveladores asociados con la menopausia, como sofocos o la sudoración, entre otros. Por su parte, la Melisa contribuye a una óptima relajación y un buen y tranquilo descanso.
Estos complementos son aptos para mujeres que no desean tomar hormonas, quieren una ayuda extra o buscan soluciones naturales, bien toleradas y de eficacia comprobada.
Además, es importante aplicar buenos hábitos para ayudan a controlar los bochornos:
- Alimentos con fitoestrógenos: pueden ser de utilidad alimentos como la soja, el lino o las legumbres.
- Ejercicio físico regular: especialmente yoga, pilates o caminatas suaves.
- Rutina de sueño y relajación: meditación, técnicas de respiración e infusiones naturales.
- Evitar desencadenantes: alcohol, cafeína, tabaco y comidas muy condimentadas.
También es clave mantener una buena hidratación y vestir con ropa ligera, preferiblemente de tejidos naturales.
Más allá del síntoma: vivir la menopausia sin miedo al sofoco
El sofoco puede ser incómodo, pero no debe condicionar la vida de ninguna mujer. Comprender qué lo causa y qué herramientas existen para afrontarlo permite recuperar el control.
Hoy en día, hay complementos eficaces y seguros que, acompañados de los hábitos correctos, permiten afrontar la menopausia desde el autocuidado y la serenidad. Y no se trata solo de aliviar síntomas, sino de vivir esta etapa con plenitud, energía y bienestar.
Cuidarse de forma natural no es una moda. Es una elección consciente, que conecta con el cuerpo, respeta su ritmo y mejora la calidad de vida.